Participantes del festejo convocado a través de las redes sociales arrojan piedras y palos contra los agentes. Miles de hinchas participan de la concentración, que en 2012 también terminó en violencia. La 9 de Julio, cortada.
El Día del Hincha de Boca llegó. Y como hace un año, el 12 de diciembre volvió a generarse un caos en el centro de la Ciudad de Buenos Aires por este motivo. En el Obelisco, miles de hinchas se convocaron para celebrar y para hacerlo cortaron la Avenida 9 de Julio. Pero la fiesta se volvió a arruinar con incidentes y un choque entre hinchas y la Policía.
Desde temprano comenzaron a llegar hinchas al Obelisco. La mayoría con los colores habituales de Boca, pero muchos también con la camiseta rosa que el equipo de Carlos Bianchi estrenó el fin de semana en el empate con Gimnasia de La Plata en la Bombonera. Esta vez, la reunión se desarrollaba en paz. Pero cerca de las 19, un grupo logró treparse al techo de una casa de comida rápida y tras la intervención policial se produjeron algunas corridas.
Producto de las pedradas y botellas de vidrio que volaron desde el lado de los hinchas de Boca, se pudieron ver al menos dos policías lastimados.
Hace un año, el festejo también terminó en escándalo. Unos 300 hinchas provocaron destrozos, saqueos y se enfrentaron con la Policía. Todo acabó con pedradas, gases lacrimógenos, balas de goma y móviles de televisión agredidos. Eso sí: no hubo detenidos.
