Fue contratado por la Municipalidad de El Bordo. Se encarga del mantenimiento de las computadoras.
El Bordo: Marcos Juncos Osan es un joven no vidente de 24 años, a los 10 se mudó por razones laborales de su padre a Rosario de Santa Fe, allí cursó sus estudios primarios y secundarios entre escuelas comunes y escuelas especiales. Se capacitó en informática y logró completar una tecnicatura para reparar PC. Por razones familiares, el año pasado regresó a El Bordo, hace tres meses fue contratado por el intendente Rosario Mazzone, como parte de su compromiso con una política de inclusión social, que inició ya en su primera gestión, con la incorporación a la planta de contratados, de dos jóvenes hipoacúsicos (sordos-mudos).
Marcos realiza distintas tareas como escribir notas, buscar datos por internet y cuando se hace necesario, reparar una PC. Para desarrollar su trabajo usa un teclado normal pero se ayuda con un programa de voz muy especial, que nombra cada tecla en la medida que sus dedos las tocan, indicándole además en qué sitio ingresó cuando navega por internet o lee la palabra escrita cuando redacta un texto. Esta forma de manejar una computadora parecería algo sencillo, sin embargo es tan rápida la forma de hablar del software, que solo un oído muy entrenado puede llegar a entenderlo. “Cuando detecto un problema en la máquina, también con mi tacto puedo desarmar la máquina, cambiar una plaqueta, conectar, desconectar o lo que se deba hacer, estoy muy contento con mi trabajo” expresó Marcos. Para poder completa la integración, la mayoría del personal se capacitó en lenguas de señas y ahora están aprendiendo a conocer las capacidades y dificultades de Marcos, para que toda actividad que se realice en el ámbito laboral se desarrolle tomando en cuenta su presencia.
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