Victoria por 1 a 0 a Suiza con gol de Di María a dos minutos de los penales
UN ANGEL CON EL ALMA. Así lo gritó Di María.
Sufriendo, con las últimas energías, con un gol agónico de Di María y un palo salvador. Así lo ganó Argentina. Así derrotó a Suiza en octavos de final y dio otro paso en un Mundial durísimo.
Cuando los penales parecían un hecho, aparecieron los espacios en el minuto 118. Messi aceleró por el centro y asisitó a Di María, que definió cruzado y dejó sin chances al arquero suizo, que hasta ese momento había sacado todo.
Argentina no jugó bien. Le costó mucho crear situaciones de gol ante un rival que se encerró todo el tiempo cerca de su arco y solo se defendió. Messi estuvo muy marcado. Y los 90 minutos se fueron consumiendo dentro de ese contexto.