Imagen ilustrativa
Ocurrió en un lavadero del centro de la ciudad. El propietario de una camioneta Toyota SRV, la dejó allí, a pesar de que tenía pertenencias de valor, y un empleado deshonesto sustrajo el dinero.
El jueves al mediodía, en un lavadero ubicado en calle Caseros, en pleno centro salteño, un hombre dejó su camioneta Toyota SRV para que se la laven.
Por la tarde, cuando retornó a retirar el vehículo, se dio con la novedad del faltante de una caja en cuyo interior declaraba tener la suma de $20.000.
De inmediato, el hombre sospechó del empleado del lavadero, el único que había manipulado el vehículo y, llamativamente, había pedido permiso para ir a almorzar a su casa sin volver a trabajar en el turno tarde.
Desde el lavadero, remarcaron que el muchacho trabajaba en el lugar hace apenas un mes, por lo que se carecía de sus datos personales.
La policía hizo las averiguaciones correspondientes hasta dar con el domicilio del acusado, ubicado en Pje. San Cayetano. Allí, el empleado negó rotundamente las acusaciones en su contra y autorizó a la policía a ingresar al domicilio donde, tras la requisa, fue encontrada la caja que contenía el dinero, conforme la denuncia del damnificado.
Al verse acorralado por las pruebas, el muchacho hizo entrega del dinero y reconoció su culpabilidad. La policía secuestró billetes que sumaban $11.050.