La investigación se inició cuando en la guardia del hospital Zonal de la ciudad santiagueña de Añatuya, ubicada a 200 kilómetros al sudeste de la capital provincial, ingresó gravemente herido un joven, quien fue identificado como Eduardo Castillo, de 23 años
La investigación se inició cuando en la guardia del hospital Zonal de la ciudad santiagueña de Añatuya, ubicada a 200 kilómetros al sudeste de la capital provincial, ingresó gravemente herido un joven, quien fue identificado como Eduardo Castillo, de 23 años.
El paciente presentaba una herida punzo cortante en el pecho, a la altura del corazón, pero pese al esfuerzo de los médicos, falleció a las 23:30 del sábado. Y según lo que los investigadores pudieron reconstruir, el fatídico hecho se inició a las 20 de ese mismo día, cuando el hombre fue a la casa de la familia de su mujer a buscarla.
Yanina Cejas, de 21 años, se encontraba en un inmueble del barrio Colonia Osvaldo, a pocas cuadras del hogar que compartían. Al llegar, el hombre la encuentra, pero en compañía de un adolescente de 16 años –de quien no se brindaron sus datos por ser menor de edad– con quien la mujer mantenía una relación paralela.
Al observar la escena se desencadena una intensa discusión entre los dos masculinos, que de las palabras pasó a los hechos cuando el menor extrajo un cuchillo de 25 centímetros de hoja, con el que asestó una mortal estocada a Castillo, luego de lo cual emprendió la huída.
Los vecinos que escucharon la pelea se acercaron a la escena del pleito y auxiliaron al herido y lo trasladaron al centro de salud pública, donde finalmente falleció. Por su parte, el agresor fue apresado algunas horas después en un templo evangélico y el arma homicida fue secuestrada en un baldío de calle Eulogio Moreno, cercano al sitio de la tragedia.
Las fuentes resaltaron que no sólo el menor quedó privado de su libertad, sino también la mujer por orden de la Unidad Fiscal Añatuya, hasta tanto se realicen las averiguaciones del caso.
Fuente: Infobae
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