Según la damnificada, su expareja quiso prenderles fuego a ella y a sus dos hijos menores. Fue en el barrio 80 Viviendas, en General Güemes.
En la noche del jueves, a las 21, la casa de Susana Corbalán, ubicada en el barrio 80 Viviendas de la ciudad de General Gemes, sufrió un voraz incendio que consumió todas sus pertenencias. Milagrosamente, ella y sus dos hijos pudieron salir ilesos. El fuego comenzó en uno de los cuartos donde estaban los menores de 4 y 2 años. Ella escuchó los gritos y fue a su rescate. "Solo atiné a tomar a mis niños y salir hacia la calle", sostuvo.
Bomberos voluntarios locales lograron dominar las llamas, pero el 90% de las pertenencias se quemaron. La casa quedó inhabitable, no solo por el fuerte olor a quemado, sino porque el sistema eléctrico quedó destruido y la estructura de la vivienda debilitada.
Susana Corbalán no dudó en acusar a su expareja, Alejandro Vargas, de 26 años, de ser el responsable del incendio. Con él mantuvo una larga relación sentimental y es el padre de sus dos hijos. La relación entre ambos se terminó hace un año y medio, pero en ese transcurso ella fue víctima de constantes acosos. "Me separé porque me golpeaba, él tiene adicciones como la del juego, desde ese momento no dejó de amenazarme, ya intentó asesinarme con un cuchillo, le hice más de 15 denuncias pero la Justicia nunca hizo nada, parece que espera que me mate", expresó.
La noche del incendio, sus hijos le gritaron que una luz había entrado por la ventana, "cuando yo ingresé a la habitación había una estopa que estaba quemando el colchón, por eso los saqué y sentí mucho miedo. Él la tiró con la intención de quemarnos a todos", dijo Susana. Según la mujer, minutos antes él la había amenazado con mensajes de texto.
Fuente: El Tribuno
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