Dos agentes de policía pertenecientes a la comisaria de Campo Santo, fueron brutalmente agredidos por un grupo de 6 a 8 personas. Las víctimas fueron derivadas al hospital Joaquín Castellanos, donde permanecen hospitalizados.
El hecho tuvo lugar en la madrugada de hoy en las proximidades del Bº Altos Hornos, el personal policial se desplazaba en una unidad móvil, cuando observaron que un grupo de personas, se encontraban ingiriendo bebidas alcohólicas y otras sustancias adictivas, ambos uniformaron descendieron de la patrulla a fin de instar a los integrantes del grupo a retirarse del lugar.
Lejos de acatar la orden, los integrantes de la patota, en forma sorpresiva comenzaron a atacar a los uniformados, reduciéndolos con facilidad debido a la superioridad numérica, los agentes de policía fueron derribados y atacados a patadas por todo el cuerpo, uno de ellos recibió un fuerte golpe de una piedra en la parte posterior de su cabeza, lo que le hizo perder la conciencia por algunos segundos.
La patota rápidamente se dio a la fuga, mientras los policías agredidos, a pesar de la golpiza, lograron subir al móvil y trasladarse por cuenta propia al hospital zonal. "Esto pasa porque la policía ya no tiene autoridad, no pueden sacar un arma, no pueden ejercer violencia, no pueden golear a nadie, están muy indefensos, están en un desamparo total, eso culpa de los políticos, qué hubiera pasado si mi hijo golpeaba a alguno, seguro que después le abrían un sumario y Derechos Humanos en seguida iniciaba una marcha pidiendo que sea puesto preso, solo para el delincuente hay justicia" expresó con mucha rabia Tito Huayte, padre del agente Simón Huayte de 22 años, quién junto al cabo Cristian Cruz de 32 fueron los agredidos.
A pesar de que algunos de los agresores fueron identificados, no hubo detenidos en forma inmediata, se espera por las acciones que se pudieran desarrollar en las próximas horas, De acuerdo al parte médico, ambos están en observación debido a que recibieron múltiples golpes en todo el cuerpo, podrían haber daños internos. El Cabo Cruz recibió cinco puntos en la parte posterior de su cabeza, para cerrar la herida ocasionado por el golpe con una piedra.
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