Tras sufrir un infarto, el apostador se desplomó junto a la máquina de azar. Denuncian que la asistencia médica tardó 25 minutos en llegar.
En la noche del lunes un apostador de 50 años murió súbitamente cuando se hallaba jugando en un minicasino del microcentro salteño.
El jugador, según datos recogidos en el lugar había retirado ya un dinero y se aprestaba a partir cuando lo sorprendió un agudo infarto de miocardio.
Muchos de los presentes denunciaron a este medio que la asistencia tardó más de 25 minutos en llegar al lugar, pese a que se encuentra a sólo metros de la catedral basílica y de la plaza principal de esta capital.
El infortunado apostador se domiciliaba en la localidad vallista de Cerrillos y fue asistido en el lugar por los presentes, quienes indicaron a este medio que el hombre se encontró consciente por más de 20 minutos, hasta descompensarse una vez más y perder el conocimiento.
"Cuando llegó la ambulancia ya estaba inconsciente y no respondía ya", dijo un veterano apostador afín al videopóker.
Horas
Luego del incidente fatal, el minicasino quedó cerrado por espacio de dos horas hasta que llegó el médico legal y personal de Criminalística.
Los casinos de Salta en los últimos tiempos fueron sitios donde se produjeron varios episodios de muerte súbita sin que las víctimas recibieran a tiempo la asistencia sanitaria de urgencia que requieren estos casos.
La crítica partió de los propios habitués del lugar, que repudiaron entre dientes la tardanza de la asistencia de emergencia médica.
El incidente se produjo en un local ubicado en calle España al 700.
Al malogrado apostador, según fuentes policiales le diagnosticaron como causal de su deceso infarto de miocardio. Llegó sin vida al hospital, según fuentes del policlínico San Bernardo.
Según testigos, la ambulancia tardó más de 25 minutos en llegar al microcentro salteño.
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