La estudiante es hipoacúsica y recibió la ovación de sus compañeros.
Gral. Guemes: Luciana Marisol Martínez no fue una candidata más, tiene 15 años y cuando hizo su aparición en la alfombra roja fue ovacionada. Sin embargo, esta candidata a reina no escuchó ningún sonido ni los aplausos ni los gritos ni la romántica música que la acompañaba: es hipoacúsica.
La joven cursa el primer año del secundario en el Colegio Facundo de Zuviría, padece de hipoacusia desde su nacimiento, un problema congénito que también tiene su hermana mayor, Romina, de 17 años.
Luciana es una gran luchadora por la inclusión y quiso ser parte de la emoción que se vive en la Elección a Reina de los Estudiantes. Pero quiso vivirlo y se presentó como candidata del 1° 4ª turno tarde.
Cuando apareció en la pasarela fue ovacionada y aunque sus oídos solo capturan silencio, su piel sintió toda esa emoción de verse y sentirse parte de una comunidad educativa que la aceptó desde el primer día. No recibió una corona, ni la capa ni el bastón, tampoco esperaba ganarlos, solo quería sentirse incluida, y lo logró con creces.
Una historia de superación
Luciana y Romina desde temprana edad fueron educadas en Efeta, donde aprendieron el lenguaje de señas y algo de foniatría. Su mamá, Graciela Tolaba, aprendió a la par y se transformó en su intérprete. Por falta de recursos económicos tuvieron que dejar Efeta y continuar en Guemes. Ya con sobreedad terminaron la primaria en una escuela nocturna gracias a su mamá. "Estuve en todas sus clases, me paraba al frente y les traducía en lengua de señas lo que la docente explicaba", comentó.
Un ejemplo
Luciana y Romina recién comienzan a cursar el secundario, pero están contenidas y siempre son un ejemplo para el resto de los alumnos.
Para Luciana, la meta es lograr el título de maestra especial, quiere ayudar a otros niños con capacidades especiales como lo hicieron con ella.
Pero no todo termina en el colegio, junto a su hermana, tres días a la semana, dejan rápidamente los útiles en su casa de Barrio Santa Teresita para concurrir al Centro Cultural Martín Miguel de Guemes. Allí se dedican a la práctica del hip hop. "Les encanta bailar, se mueven imitando el baile del profesor y sienten la música en su piel", contó Graciela, una mamá que acompaña en cada paso el desarrollo de sus hijas, que se convirtieron en un ejemplo de superación para toda la comunidad de Guemes.
Fuente: El Tribuno de Salta
Informe: Sergio Tapia.
Info: www.gralguemes.com.ar || El Portal de Guemes en internet.
