Es el testimonio de
algunos de los testigos que estuvieron en el balneario Carlos Xamena
ayer durante de los disturbios. Hubo mucha indignación en las personas
que estaban en el predio por el accionar policial. El sujeto estaba
borracho, indican.
El hecho ocurrió durante el fin de semana en el balneario Carlos Xamena, cuando un degenerado quiso manosear a una menor en la pileta. Familiares de la niña y las personas que estaban en el lugar quisieron linchar al pervertido.
Lo que comenzó como una agradable tarde de piletas, terminó con una batalla campal dentro del balneario. Gritos, golpes y pedradas aumentaron el clima de disturbios.
“Fue algo de terror”, dijo una mujer que presenció los hechos. Destacó que mucha gente se indignó por la actitud de la policía que custodiaba al degenerado en el baño.
Lo que comenzó como una agradable tarde de piletas, terminó con una batalla campal dentro del balneario. Gritos, golpes y pedradas aumentaron el clima de disturbios.
“Fue algo de terror”, dijo una mujer que presenció los hechos. Destacó que mucha gente se indignó por la actitud de la policía que custodiaba al degenerado en el baño.
“El hombre gritaba barbaridades desde adentro del baño. Se amontonó una gran cantidad de gente. Cuando la policía se lo llevó, comenzaron a tirar piedras al patrullero y rompieron vidrios. Un efectivo de infantería quiso pegarle a una mujer”, relató la testigo.
Otra de las personas que vio todo lo sucedido dijo que la menor a la que habían intentado abusar salió de la pileta gritando desconsoladamente. “Vi que un señor venía correteando a otro, lo agarró en la orilla, le empezó a pegar y le hundía la cara en el agua”, contó la mujer.
“Cuando el padre nos dice que el tipo borracho la había manoseado a la nena, todos empezamos a gritar y una señora dice que se lo entreguemos a la policía. Cuando lo sacaron del agua, un policía le dice al degenerado “bueno ándate, desaparecé de acá”. Cuando escuchamos eso entramos a gritar, es cuando viene la policía femenina y le dice que no lo deje ir porque ‘se armaba’”, fue el relato de la testigo.
La mujer contó que cuando la policía encerró al degenerado en el baño para custodiarlo, ante los insultos e intentos de agresión de las personas indignadas, el hombre, borracho, los invitaba a que ingresaran al baño a pelear.
Fuente: Radio Vos
