22 DE JULIO 2018 - 00:00 Policías lograron salvar a una joven turista y a un vecino subido a una torre de 80 metros. No hubo reconocimientos.
Los casos sucedieron esta última semana en el Valle de Lerma. El primero en Campo Quijano, la mañana del lunes. En el acceso de las ruta nacional 51 al pueblo, una camioneta de un matrimonio de Santa Fe, junto a tres hijos adolescentes, circulaba por esa zona con destino a la Puna salteña. El vehículo por una mala maniobra del conductor cayó dentro del canal de riego en la curva de Río Blanco. El ruido ocasionado por el vuelco fue alertado por un efectivo policial que se encontraba en el puesto de control de seguridad vial, ubicado a unos 200 metros del accidente.
El sargento ayudante Sergio Daniel Ramos acudió de inmediato al sitio. La camioneta estaba dentro del canal, con las ruedas hacia arriba y obstaculizando el paso del agua, lo que provocó que la cabina del vehículo rápidamente se anegara. Dentro había quedado aprisionada por el cinturón de seguridad una jovencita de 16 años. Ramos al observar el panorama no dudo en arrojarse a las aguas del canal para rescatar a la adolescente. El resto de la familia puso salir por sus propios medios.
A pesar del pánico de ese momento, el sargento de la Policía pudo controlar la situación. Ayudo al salir a la familia y socorrió a la menor.
Los turistas se dirigían hacia San Antonio de los Cobres. Tras unas horas de observación en el hospital local de Quijano fueron dados alta.
Salvataje en altura
El miércoles en la madrugada, un sujeto de 30 años decidió trepar a una antena de 80 metros de alto de la empresa Movistar, ubicada en inmediaciones del complejo municipal de la localidad de La Viña. El frío reinante y las ráfagas de viento a esa altura no impidieron que efectivos policiales subieran a esa torre, desde donde el vecino intentaba arrojarse.
En medio de la oscuridad se montó un rápido operativo a cargo del subcomisario Julio Hoyos. Mientras se intentaba subir a las alturas para rescatar a este hombre, el resto de la dotación de efectivos preparaba el lugar ante cualquier posible desenlace. Tras cuatro horas de riesgosas maniobras, los efectivos de Bomberos de la Policía lograron bajar y reanimar al sujeto que había quedado colgado en las alturas. La noche, el frío y el viento eran los impedimentos del salvataje que tenía las horas contadas.
Fueron momentos de tensión. Efectivos de la subcomisaría de La Viña y especialmente Bomberos de la misma fuerza y los voluntarios de El Carril coordinaron las acciones para auxiliar al vecino. Por suerte ante la rápida intervención del personal policial se logró realizar las técnicas de reanimación por cuanto la persona se habría suspendido del cuello mediante estrangulamiento y con fuerte aliento etílico. Tras resguardar a la persona, se procedió a su descenso, con sogas y arneses. Cuando el hombre recobró la conciencia fue trasladado en ambulancia al hospital local donde se recupera. Quienes trabajaron en esta loable acción de arrojo fueron el bombero oficial ayudante Maximiliano Plaza, el suboficial mayor Gustavo Gutiérrez, los sargentos ayudantes Pablo Germán y Pedro Canteros, el agente Aníbal Peloc y el chofer del móvil 949, sargento ayudante Fernando Solís.