No se vio ni un solo maestro en la Plaza 9 de Julio. La cantidad de carpas disminuyeron a menos de la mitad y muchas de ellas no tienen ocupantes. En Aunor hay menos de 60 maestros
SALTA.- El paro docente perdió la fuerza que en algún momento tuvo con el apoyo de gremios del Estado que en algunas ocasiones acompañaron a los educadores, y con la mayoría de militantes obreros que marcharon como maestros. Es sabido que los representantes de departamentos de la Provincia de Salta aceptaron la última propuesta salarial del Gobierno y firmaron su conformidad y el regreso a clases el próximo lunes 5 de mayo.
Sin embargo, hay todavía un grupo de docentes que siguen al Partido Obrero y se niegan a abandonar su actitud intransigente, a pesar que el pasado miércoles en la última asamblea el resto de los docentes repudió al PO y las aguas se dividieron drásticamente.
La insistencia de movilización con medidas violentas cansó a los maestros y profesores, quienes entendieron el mensaje del Ministro de Educación de Salta. Roberto Dib Ashur les aseguró a todos los docentes que el diálogo nunca se cerrará y que la última oferta salarial es lo mejor que podía ofrecer el Estado con los recursos que actualmente tiene. Esto sumado a su compromiso de que se seguirán discutiendo muchos de los puntos que pidieron en el paro.
Ayer no se vio ni un solo maestro en la Plaza 9 de Julio en el acampe. La cantidad de carpas disminuyeron a menos de la mitad y muchas de ellas no tienen ocupantes. Algunos maestros, alrededor de cincuenta, permanecieron en el Peaje Aunor. Sin embargo, casi la totalidad de los docentes del interior volvió a sus localidades a iniciar las clases.
Por el robo del libro de actas por parte del Partido Obrero en la asamblea del pasado miércoles, y la actitud agresiva de los militantes para con la presidenta de la Asamblea, es que la misma debió pasarse a un cuarto intermedio. Cientos de docentes se fueron antes de que finalizara la pelea, y decidieron que volverán a dar clases.
“Ya estamos cansados, nos peleamos entre nosotros y todo porque se metieron los políticos estos que nada tienen que ver” aseguró a Mercedes A., una docente de capital. Ella expresó que los maestros se cansaron de las intromisiones y que traten de obligarlos a pensar como ellos, exigiendo un básico imposible de obtener.
Esta tarde a las 14 habrá una nueva reunión en el Centro Vecinal de barrio 20 de Febrero. Allí decidirán los maestros que restan si siguen con las medidas del PO o vuelven a clases con una mesa de diálogo dispuesta y abierta por parte de las autoridades provinciales. (Redacción )