Las instalaciones se encuentran ubicadas entre los barrios Arturo Illia y 60 Viviendas. Aguas del Norte ya fue notificada.
En tiempos en los que se busca generar conciencia acerca de la necesidad de cuidar el agua, un tanque elevado ubicado entre los barrios Arturo Illia y 60 Viviendas derrama miles de litros por día, a causa de las roturas que sufre su estructura.
Esta situación lleva ya seis meses y parece no tener solución, pese a los constantes reclamos de los vecinos.
El tanque abastece a gran parte de las viviendas ubicadas en la Banda Este de la ciudad.
Los vecinos se quejan por los charcos y el barrial que generan las pérdidas.
Pero las quejas van más allá de las simples molestias, apuntan hacia el lamentable derrame de tanta agua potable, en momentos en los que la propia empresa ha lanzado campañas sobre la importancia de cuidar el líquido elemento. “No podemos regar calles, lavar autos ni regar los jardines, las amenazas de multa están la orden del día, pero entonces, ¿quién se encarga de multar a Aguas del Norte por tanto derroche?”, expresaron los vecinos del barrio Arturo Illia.
Nunca hubo una clara explicación de los motivos que ocasionan la pérdida, porque el derrame se producía durante la noche, cuando hay menos consumo.
Algunas respuestas indicaban fallas en un flotante, otras a caños enterrados rotos, lo que trascendió el fin de semana pasado es que habría un caño aéreo quebrado.
Desperfectos
En la rotura se pueden apreciar intentos de taparlo con plástico, algo muy rudimentario como para que sea efectivo. Sin dudas ese “remiendo” es un claro reflejo de la poca importancia que le da la empresa a esta situación. Voluntad por parte de los operarios locales hay, pero carecen de los elementos necesarios para resolver el problema, todo debe llegar de la capital salteña y las demoras son inaceptables.
“Los trabajadores de Aguas del Norte deben poner la cara para tapar a una empresa que nos tiene casi abandonados”, declararon los vecinos.
