Una mujer de 42 años quedó detenida en General Gemes acusada de explotar sexualmente a su hija y a otras tres adolescentes de familias socialmente vulnerables. Las víctimas tienen de 14 a 18 años. Todas pertenecen a hogares pobres. Dos de ellas habían abandonado la escuela hace más de un año y una está atrasada en la educación para su edad.
Las averiguaciones comenzaron hace unas tres semanas, cuando comerciantes de la zona de la Terminal de Ómnibus denunciaron movimientos que les resultaban sospechosos. De acuerdo con la información que aportaron a la Policía, la mujer hacía que las chicas subieran a remises con hombres recurrentemente.
Efectivos de la Brigada de Investigaciones de General Gemes y de la División Trata de Personas pidieron la intervención de la Justicia Federal y el miércoles detuvieron a la acusada cuando intentaba que una de las víctimas se fuera en un auto con un adulto.
Las cuatro chicas fueron trasladadas a un refugio en Salta Capital hasta ayer, cuando volvieron a sus casas. La detenida, cuyo nombre se mantiene en reserva para proteger la identidad de su hija y de las demás víctimas, podría declarar hoy.
El jefe de Trata de Personas, Rubén Aguirre, manifestó a El Tribuno que las dos hijas mayores de la detenida también dijeron haber sido sexualmente sometidas por su madre hace años.
“Cuando las chicas subían al remise, las llevaban a un alojamiento, donde se concretaba la relación sexual. Ella conseguía los clientes y les cobraba de 100 a 150 pesos. A las chicas les daba 40 pesos”, sostuvo Aguirre.
La mujer acusada habría aprovechado la vulnerabilidad de las adolescentes para montar un negocio que ya llevaba tiempo. De las cuatro víctimas, solo dos van a la escuela según informó a este medio el secretario de Derechos Humanos, Martín García Caínzo. Dos de las chicas, de 16 y 18 años, abandonaron los estudios antes de 2013. Otra de las adolescentes, de 14 años, está recursando primero. Solo una de ellas, de 15 años, se encuentra en el nivel en que debe estar a su edad.
La falta de inclusión en el sistema educativo es solo uno de los indicadores de la situación de riesgo social en que se encontraban. “Si todas hubieran ido a clases hubiera sido más fácil que un profesor se diera cuenta de lo que estaba pasando por las faltas o por los cambios en el comportamiento”, dijo Aguirre.
Desde Trata de Personas señalaron que las chicas que habrían sido sometidas junto con la hija de la detenida pertenecen a familias de muy bajos recursos en las que faltaba la contención. Por lo menos dos de ellas se ausentaban de sus casas por muchas horas sin que a sus padres les llamara la atención.
Habían regresado a sus casas
Las cuatro chicas que habrían sido sometidas a la explotación sexual por una mujer que quedó detenida en General Güemes estaban en buenas condiciones de salud y ya habían vuelto a sus casas según informó ayer a El Tribuno Martín García Caínzo, secretario de Derechos Humanos de la Provincia.
El funcionario aseguró que las adolescentes tuvieron contención de psicólogos y asistentes sociales del Gabinete de Asistencia a las Víctimas de Trata de Personas y que se les haría un seguimiento.
García Caínzo dijo que regresaron a sus hogares en Güemes porque la Justicia no había ordenado que permanecieran más tiempo en el refugio de Salta Capital al que fueron trasladadas cuando detuvieron a la mujer acusada de obligarlas a tener relaciones con adultos.
“Es un delito complejo en el que se mezcla la situación social y económica de las víctimas con la ubicación cercana a la triple frontera de nuestra provincia”, definió el secretario de Derechos Humanos.
La investigación indica que la explotación se habría concretado, entre otros lugares, en una casa alquilada de la calle Alvarado. La causa quedó a cargo del juzgado federal número uno.
“Generalmente las redes de trata buscan a víctimas vulnerables desde el punto de vista económico, social y emocional”, sostuvo Rubén Aguirre, titular de la División Trata de Personas de la Policía.
Este delito consiste en someter a la explotación sexual o laboral por medio de violencia física, engaños o amenazas. Las condenas para los que desarrollen esta actividad en Argentina pueden ir de los 3 a los 15 años de prisión. Cifras oficiales indican que, cada año, las fuerzas de seguridad rescatan a más de 800 víctimas en el país.
Las personas que sufrieron este tipo de situaciones en Salta son trasladadas a un refugio que depende de Derechos Humanos. Pueden permanecer ahí hasta treinta días, aunque el plazo puede prorrogarse.
CASOS ANTERIORES
El 19 de enero una joven salteña fue rescatada de la trata de personas en Catamarca. La víctima había aceptado viajar por un empleo de niñera a la provincia vecina pero, cuando llegó, la hicieron trabajar en un cabaret.
--------------------------
El 3 de diciembre la Policía detuvo en Tucumán a un hombre que trasladaba hacia Salta a una chica de 15 años que era de La Pampa y había desaparecido días antes. El captor la había conectado por Facebook.
--------------------------
En agosto de 2013 se descubrió en General Güemes que dos hombres sometían a la explotación sexual a una chica de 15 años de la provincia de Chaco. La víctima fue capturada cuando buscaba trabajo.
--------------------------
En junio de 2013 se detectó el caso de una chica de 17 años que estaba viajando sola a Buenos Aires para encontrarse con un hombre que la había convencido de irse de su casa a través de mensajes de Facebook. Intervino la Policía.
---------------------------
El lunes pasado, en un operativo de Gendarmería en la ruta 5, se descubrió que 4 mujeres de nacionalidad china eran trasladadas en un vehículo sin sus papeles migratorios. Se sospecha que iban a ser víctimas de explotación laboral.
Fuente: EL TRIBUNO DE SALTA EDICION DIGITAL
)
